viernes, 25 de mayo de 2012

TANTO QUE DECIR

He de admitir que el día que comencé a escribir este blog me entró una sensación de desesperación cuando por mi nefasta relación con estos artefactos llamados ordenadores, se quedo pillado, y temí perder lo poco y nulo que había escrito. Igual que en ese momento, tantos otros de esta vida, donde se nos quedan tantas cosas que decir en el tintero. Hoy, mismamente, hace una hora, cuando venia en el bus universitario, escuchando tranquilamente música con la que poder subir el ánimo(el poco que me queda sinceramente) , comencé a pensar en tantas y tantas cosas que sé que jamás me atreveré a decir aunque las sienta. No me atreveré a decirlas(ni muchísimo menos escribirlas) tal vez porque ya ni siquiera me acuerdo que era lo que atormentaba mi alma.
¿Que hubiera pasado si se hubiese borrado aquella primera entrada?Aunque hubiese querido restablecerla, como cuando un cirujano intenta salvar a un paciente moribundo y agonizante en el último fuego de su pobre existencia, jamás hubiese dicho lo mismo, aun con vistas a pretenderlo.
Somos hijos de la improductividad más fiera,somos hijos de la esterilidad, de la inutilidad , podríamos dar tanto de nosotros mismos, que no damos...Es más fácil quedarnos sentados y tal vez esto último, de lo ruin que suena, no tenga justificación ni perdón siquiera.Esta inutilidad se manifiesta más aún, como había ido advirtiendo en el terreno de las ideas(tantas y tantas muertas). Siguiendo a Kant, ¿por que nos cuesta tanto y tanto pensar por nosotros mismos, sin nadie que nos guíe ni tutele? Pues por vagancia y comodidad, es más fácil quedarse en nuestra eterna minoría de edad(si, porque seguimos, aunque hipócritamente se diga que no estando ciegos, sordos y mancos, en un mundo en el que hasta nuestro perro nos domina).Es más fácil que los libros piensen por mi(que nos den los apuntes y vomitarlo todo en un examen), que el arquitecto decida por mí como se ha de construir la cocina,que los puñeteros libros de autoayuda me ayuden cuando tengo un problema( y tantas y tantos casos que por desgracia aunque tuvieran qu hacerlo, no nos desperan).
Mas aún cuando nos metemos en el terreno de lo imposible, esto es, cuando decimos "no se va a cambiar nada,¿por que hacerlo si es imposible? ". No podemos ser Humpty Dumpty (aquel que le decía a Alicia que nadie podría  entender lo que el decia si el mismo no explicaba que era lo que estaba diciendo. En una regresión al infinito, no podria nunca haber conversacion(nunca llegariamos a entenderlo). Y como es de pura lógica que nunca podran llegar a entenderse, dado lo dicho, Alicia y este, por que seguir intentando una conversación coherente, si sabemos de antemano que es una imposibilidad manifiesta?Pues bien, Herman Hesse afirmó  en su  día que "para que pueda surgir lo posible  es preciso intentar una y otra vez lo imposible", ya que, siguiendo a Napoleón "lo imposible es el fantasma de los tímidos y el refugio de los cobardes".
He de concluir como había comenzado, y siguiendo a Sartre, que siempre llevaba un cuaderno donde apuntaba vivencias, sensaciones e ideas, habría que portar siempre una libreta o diario, como un bebe que lleva un pañal, pretendiendo y llevando por bandera la idea de que, por estúpida que sea, no muera ninguna idea, que al fin y al cabo el pensamiento es el legado más importante que tenemos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario